En un futuro lejano, Norteamérica está dividida en 4 reinos: las tierras del norte habitadas por trols, las tierras del sur habitadas por humanos, las tierras del oeste habitadas por elfos y las tierras del este habitadas por gnomos y enanos.
La historia comienza con un grupo de elfos preparándose para correr a través del bosque con los ojos tapados. Los ocho primeros en llegar a la meta serán los elegidos para proteger a Ellcrys, el árbol sagrado. Para sorpresa de todos, en esta carrera de chicos, también compite la princesa Amberle (Poppy Drayton), quien quiere ser la primera mujer en conseguirlo. Cuando llega en octava posición, nadie da crédito, y en el momento de la coronación de los ocho, Ellcrys, empieza a perder sus hojas. En el momento en el que el árbol pierda su última hoja, una horda de demonios serán conducidos por Dagda Mor (un druida élfico corrompido por la magia oscura) para conquistar las cuatro tierras.
Amberle cree que esto ha ocurrido por su culpa, por haber intentado pertenecer a un grupo en el que sólo se aceptan hombres. Sin embargo, uno de los demonios se escapa y mata a sus siete compañeros y se la encomienda la misión de llevar la semilla de Ellcrys a Salvafuerte y regressr para resucitar al árbol.
Para ello, contará con la ayuda de Will (Austin Butler), un medio elfo que tiene tres piedras mágicas para luchar contra los enemigos y quien está aprendiendo a ser un Shannara gracias al druida Allanor.
Quien también tendrá un papel importante en está misión es Eretria (Ivana Baquero), una chica que fue vendida a un grupo de vagabundos cuando era una niña y que lo único que conoce hasta la fecha es robar para sobrevivir.
¿Conseguirán salvar entre los tres a Ellcrys y al mundo tal y como lo conocen?
Esta primera temporada está basada en el segundo libro de la saga Shannara, titulado: Las piedras élficas de Shannara.
Opinión personal
En cuanto vi el primer capítulo supe que me iba a enganchar, me encantan estos mundos distópicos en los que en el futuro todo está del revés a como lo conocemos ahora y en el que alguien tiene que salvar el mundo.
Si os gustan los juegos del hambre, el corredor del laberinto, el señor de los anillos... probablemente sea una serie hecha para vosotros. Se que estos temas últimamente se están quemando demasiado en la gran pantalla, pero una serie que está producida por el director de Iron Man... se merecía una oportunidad y, sin duda, se la ha merecido.
Los paisajes naturales de Nueva Zelanda son muy acertados y los efectos especiales me sorprenden que sean tan buenos para una serie.
Otro punto a favor es Manu Benett, el gran Crixo en Spartacus o Deathstroke en Arrow.
Mi nota final es de 8'5/10.
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