Víctor vuelve a infiltrarse (esta vez como enfermero) para intentar averiguar el paradero de Catherine Le Monnier, una enfermera del Hospital policlínico Montalbán. El comisario Casas volverá a estar al mando de la infiltración y rescatará el personaje del inspector Vidal para que les ayude en la investigación.
Sin embargo, Catherine no es la única en paradero desconocido, otras dos trabajadoras del hospital han desaparecido, una hallada muerta al poco de empezar la investigación y, la otra, con un poco más de suerte, encontrada viva pero en una situación funesta.
Para sorpresa de los españoles, cuando Víctor está en el hospital descubre que la policía francesa también está infiltrada en el policlínico debido a que la desaparecida es la hija de una alto cargo político francés. Por ello, trabajarán codo con codo con Sophie (la inspectora) y Alain (un policía infiltrado como cirujano).
Como en la primera temporada, nos dejan claro desde un principio que en el hospital no hay nadie que tenga las manos limpias y que todos pueden ser sospechosos, desde Doña Adela, la jefa del centro (Concha Velasco), hasta los celadores.
Poco a poco irán recolectando pruebas para poder llegar al meollo de la cuestión.
¿Lograrán encontrar a Catherine Le Monnier con vida?
Opinión personal
Ante la ausencia del personaje de Laura (Blanca Romero), Víctor entablará una relación con Belén, una doctora del Montalbán (Olivia Molina). Un romance mucho más justificado que el beso estúpido de los dos protagonistas en la primera temporada.
Y por otro lado destaco el papel de Vicente Romero (Vidal), que ha pasado de ser un secundario en la primera temporada a ganarse un hueco en los recurrentes de esta segunda temporada. Nos ha dejado buenos momentos y grandes descubrimientos para la investigación.
Mi nota final es de 7'5/10.
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