Desde muy pequeña, Edith (Mia Wasikowska) veía fantasmas que la advertían de que tuviera cuidado con La cumbre escarlata. Al principio confusa porque no sabia a que se referían los fantasmas, decide escribir un libro que llama la atención de Thomas (Tom Hiddleston), un inventor que busca la aprobación del padre de Edith para conseguir financiación.
Tras la muerte de su padre, Edith se va a vivir a una montaña con su reciente marido, Thomas, quien tiene una mansión en el que convive con su hermana Lady. Una vez allí, Edith se da cuenta que la estancia en esa casa no va a ser nada agradable.
Edith descubrirá un secreto sobre la vida anterior de su marido y caerá enferma cuando Lady la intenta envenenar con el té.
Finalmente, el doctor de la ciudad (amigo de la infancia de Edith), consigue localizarla tras mucho tiempo sin saber de ella e intentará ir a rescatarla de la pesadilla en la que vive.
¿Qué secreto esconden Thomas y Lady?
¿Conseguirá Edith salir con vida de La cumbre escarlata?
Opinión personal
El ambiente que se crea envuelve la trama en un misterio constante de por qué Edith ve fantasmas. Algo que en cualquier película de este género tiene un fin terrorífico, aquí lo usan con un fin diferente (que probablemente Edith agradezca).
La arcilla de color rojo cubre todo, paisaje y casa incluida, del color escarlata que le da nombre a la película. Esto hace que la nieve quede teñida de rojo y que las paredes dentro de la casa parezcan que lloran sangre. Todo con una gran ambientación siniestra.
Mi nota final es de 7'5/10.
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